Cuidado ambiental transforma a industria del plástico

Cuidado ambiental transforma a industria del plástico


De los 53 millones de toneladas de basura que generamos los mexicanos cada año sólo el 9.6 por ciento se recicla, lo que coloca a México por debajo del promedio que reportan los países de la OCDE que es del 24 por ciento. En cuanto a materiales revalorados, el mayor porcentaje fue papel y cartón -con una de cada 3 toneladas-; le siguen el PET, vidrio, otros plásticos y metales. 

De acuerdo con la Asociación Nacional de Industrias del Plástico, el 90 por ciento de los plásticos son susceptibles de reciclaje y con ello, el mercado tendría un valor potencial de 3 mil millones de dólares con un crecimiento anual del 10 por ciento. 

Con el compromiso de cuidar el medio ambiente han surgido empresas como Ecodom, que produce materiales de construcción con materiales reciclados; o la cooperativa Plastien, dedicada al acopio y reciclaje de plástico, y que es impulsada por la compañía Braskem Idesa en Nanchital de Lázaro Cárdenas, Veracruz, donde se ubica su planta.

Al respecto, la industria petroquímica desarrolla nuevos componentes y materiales con el fin de contribuir a la reutilización o reciclaje del plástico para producir nuevos bienes como empaques, envases y botellas. 

El objetivo es que esos nuevos productos permanezcan más tiempo dentro del ciclo de vida del producto plástico. Te recomendamos: Reciclaje de plásticos, un reto global ​“Tenemos que ver al plástico como un aliado que ha traído beneficios, como en la industria de los alimentos y la medicina. 

Braskem Idesa ha venido apostando por esta economía circular del plástico que se traduce en el rediseño de los empaques para que cumplan un ciclo de vida mayor y también buscar reducciones de los plásticos que son innecesarios”, indicó Mariana Albarrán, gerente de sustentabilidad de Braskem Idesa. 

De acuerdo con el Foro Económico Mundial, con el reciclado de dos toneladas de plástico usado se ahorra una tonelada de petróleo bruto, una gran cantidad de agua y, además se reducen las emisiones de gases de efecto invernadero y los residuos generados en el proceso.

“El consumidor está orientado hacia este tipo de productos que tienen un impacto ambiental reducido por ejemplo bolsas reciclables, que le ayuden a reducir la generación de sus residuos”, concluyó Albarrán.



Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *